- Capitulo veinticinco -

Apenas cruce la puerta se me partió el corazón James estaba sentado en mi cama con la mirada perdida y los ojos llenos de lagrimas, no aguante verlo así de triste me lance a sus brazos y lo abrace lo mas fuerte que pude, el no dijo nada solo escondió su cabeza en mi pecho y lloro desconsoladamente como nunca lo había hecho, paso un largo rato para que el se calmara, se aparto de mi, limpio sus lagrimas y después puso sus hermosos ojos sobre mi

- Perdóname por todo esto - me dijo con su voz ronca de  tanto llorar

- No pidas perdón desahogarte es todo lo que necesitas y para eso estoy yo - le dije sonriendo

- Gracias Ana, es que me siento terrible no se como he vivido tanto tiempo al lado de alguien que no conozco y me duele aun mas saber que el es el causante de tu sufrimiento - me dijo muy dolido

- Amor ya no te des mas golpes de pecho entiéndelo tu no eres el culpable  tu no sabias lo miserable que es ese sujeto ademas es tu padre era tu obligación vivir junto a el - le explique 

- Si tienes razón - me dijo con una medio sonrisa

- Mejor descansemos hoy no fue el mejor día de todos y estoy agotada - le dije

- Y a rus hermanos no les molesta que me quede aquí - me pregunto haciendo una mueca

- No tranquilo ellos están agradecidos contigo por todo lo que haz echo por mi y entienden perfectamente que tu no tienes la culpa de nada - le explique para que se sintiera mas cómodo y dejara de sentir tantas culpas

Agarre una pijama y entre al baño a cambiarme mientras James se cambiaba con algo de ropa que le presto mi hermano, nos acomodamos en mi cama hasta que poco a poco el sueño nos venció.

***

Me levante muy temprano James aun seguía durmiendo, me quede observándolo por unos segundos y le di un beso en su mejilla, como ya no tenia sueño me levante, busque algo de ropa y entre al baño para darme una relajante ducha, me vestí  cepille mis dientes y salí del baño, james aun seguía dormido y me gustaba verlo  así de relajado, no como anoche tan triste, salí de mi cuarto a preparar el desayuno, mis hermanos también seguían durmiendo y mis padres aun no llegaban, eso me tranquilizo no quería que me bombardearan de preguntas al ver mi labio roto y los golpes en mi cara.

Prepare unos huevos revueltos con jamón y una jarra de jugo de naranja, lo organice todo en una bandeja y justo cuando iba a dar la vuelta alguien me tomo por la cintura, no tuve que mirarlo para darme cuenta de quien se trataba , su agradable aroma me invadió por completo, solté la bandeja y me gire sin soltarme de sus brazos, esos brazos que me llenaban de paz y tranquilidad

- Buenos días amor - le dije dándole un corto beso en los labios

- Buenos días ¿como te sientes? - me pregunto mirándome los golpes y acariciando mi mejilla

- No te preocupes se ve peor de lo que es, ya no me duele - le respondí

- Lo siento - me susurro

- Ya hablamos de eso no es tu culpa - le repetí por quien sabe ya cuantas veces

- Si pero lo siento - me volvió a insistir, tan solo le sonreí  para dejar el tema atrás

- Vamos a desayunar - le dije señalando la bandeja, el asintió y nos sentamos en el comedor a los pocos minutos Karen Y Arthur se nos unieron y terminamos platicando de temas triviales olvidando por completo la situación que se avecinaría horas mas tarde.

la puerta principal de la casa fue abierta provocando que mi corazón se aceleraba y que todos los de la mesa se tensaran

- Buenos días - dijeron mis padres extrañados al vernos en la casa en vez de estar estudiando y con semejantes caras, yo voltee el rostro para que no me vieran

- Hola papa y mama, siéntense necesitamos hablar con ustedes  - dijo Arthur en tono serio, ellos se preocuparon aun mas y le hicieron caso a mi hermano

- Los escuchamos - dijo papa, los chicos me voltearon a ver, a si que no me quedo mas remedio mas remedio que dar la cara y apenas me gire los rostros de mis padres se desfiguraron.

- Por dios Anabelle que te paso - dijo mi madre horrorizada  mi padre volteo a ver a James y el agacho la mirada, de mi boca no salia ninguna palabra, me encontraba en pánico no sabia por donde  empezar

- Quieres que yo les cuente - me dijo Arthur pero me negué
- No Yo les diré  pero les pido por favor que me perdonen por haberles ocultado esto - les dije
- Ana habla de una vez - dijo mi padre alzando un poco la voz, asentí y empece a relatarles la historia que inicio años atrás y que ayer se volvió a revivir, varias lagrimas resbalaron por mi rostro mientras les contaba a mis padres, James me tenia agarrada la mano y la apretaba con fuerza, mi madre y karen estaban a punto de derrumbarse y mi padre apretaba los puños con fuerza y mantenía la mirada fija en mi, mi hermano parecía el mas tranquilo pero yo lo conozco muy bien por dentro estaba destrozado 
- ... y ayer a través del encuentro con este hombre logramos que la policía lo tenga detenido pero  aun no se sabe que va pasar con el, tenemos que presentarnos hoy a la una de la tarde en el juzgado - termine de contarles ya mucho mas calmada
- Como es posible que haya pasado todo esto y no nos diéramos cuenta - dijo mi padre furioso
- Lo siento tanto papa, yo tenia mucho miedo y no me atreví a contarles - le conteste con la voz rota
-mi niña mi pobre niña, yo debí cuidarte mas, todo es mi culpa - dijo mi madre llorando
- Porque maldito desgraciado lo voy a matar, como pudo hacerle esto a mi hija, lo voy a matar a penas lo vea - grito mi padre y tiro una porcelana que había en la mesa
- Tranquilízate papa, el va pagar por todo lo que hizo - le dijo mi hermano tomándolo por los hombros
- Tu no entiendes fue a mi hija a quien la deshonraron de una sucia manera, la hizo sufrir y yo no pude hacer nada, no la supe cuidar soy un mal padre - dijo mi padre estallando en llanto
- No Papa, tu eres el mejor padre del mundo no te culpes, tu no sabias que eso iba a pasar nadie lo sabia - le dije y lo abrace, el me apretó muy fuerte entre sus brazos a los segundos mis hermanos y mama también se unieron a nuestro abrazo, no se cuanto duramos así, pero cuando deshicimos el abrazo James ya no estaba, lo busque por toda la casa pero no lo encontré.

- Tranquila Ana, debió haber ido a cambiarse - me dijo Arthur al ver mi desesperación
- ¿Sera? pero porque no se despidió - le pregunte
- Quizás no quería interrumpir, pero tranquila de seguro llega al juzgado - me respondió el
- Si tienes razón me voy a cambiar y ya bajo para que nos vayamos - le dije y el asintió

Subo a mi habitación y el aroma de James se encontraba esparcido por todo el cuarto una sonrisa tonta se dibujo en mi cara, empece a buscar la ropa adecuada para ir a ese lugar, me encontraba feliz a pesar de todo hoy por fin se acaban mis días tristes, podre volver a vivir en paz sabiendo que ese hombre estará tras las rejas y jamas  volverá hacerme daño, ni a mi ni a James, me vestí con lo que había elegido y baje para salir junto mis padres y hermanos hacia el juzgado, estaba algo nerviosa no sabia que iba a pasar en ese encuentro mi padre estaba muy furioso y no se si pueda contenerse al ver a ese hombre, el recorrido fue muy silencioso todos estábamos muy dispersos en algún lugar de nuestros pensamientos, yo no podía dejar de pensar en James, esto debe de ser  muy difícil para el, es a su padre a quien van a encerrar en la cárcel a quien sabe cuantos años  y aunque el no lo demuestre se nota que le hace mucho daño.

Llegamos al juzgado y nos hicieron pasar a donde se encontraba ese hombre, pero James no estaba, me decepcione al no encontrarlo en este momento es donde mas lo necesito pero también lo entiendo quizás no quiera ver como encierran a su padre.
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- Capitulo Veinticuatro -

En el transcurso hacia la estación de policía todo fue muy silencioso, James y yo íbamos en un auto y ese horrible sujeto iba en otro auto, por mi parte me encontraba como en otro mundo quería aclarar mi mente olvidar por completo todo esto que acabo de vivir, no entiendo en que momento paso todo esto, porque precisamente el padre de mi novio tenia que ser el desgraciado que me arruino la vida, no se como resistir a tanto,. bueno en lo único que pienso en este momento es que ese hombre pague por todo lo que ha hecho y se pudra en la cárcel  aunque me duele por James el no merece tener un padre como ese ademas el esta sufriendo demasiado en estos momentos lo se por su mirada se siente culpable y yo no quiero que sea así el no hizo nada y yo lo amo, quiero poder superar esta etapa pronto y ser feliz con el.

Llegamos a la estación y nos llevaron a una sala para rendir declaración de todo lo que había pasado, primero nos hicieron pasar a nosotros y al padre de james lo tenían esposado antes de entrar tome de la mano a James el me miro desconcertado pero apretó Fuerte Mi Mano, nos sentamos y empezaron a hacernos muchas preguntas, yo les conté todo lo que había pasado incluso lo de años atrás, James no me miraba respondía a lo que le preguntaban pero parecía que no estuviera allí  sus ojos estaban tristes y aguados, ya no sabia que iba a pasar con nosotros el se sentía demasiado culpable tendría que hablar muy seriamente con el y decirle que no es su culpa y que no permitamos que esto nos separe que yo lo necesito a mi lado y que se que el me necesita a mi. Después de interrogarnos llego mi hermano que también sirvió como testigo de lo ocurrido hace dos años y por ultimo le toco declarar al padre de James, no se que diría, si se atrevería a confesar o lo negaría todo, los oficiales nos dejaron esperando mientras a James y a mi  nos curaban las heridas que teníamos.

-Jóvenes - nos llamo un oficial, ya llevábamos bastante esperando y estaba muy ansiosa ademas no me sentía cómoda con la actitud de James y mi hermano, estaban muy extraños no me hablaban tan solo miraban hacia a otro lado como si yo no existiera.

- Si señor - respondimos todos al tiempo

- Necesito la presencia de sus padres o ascendientes para aclarar este asunto y el señor Peterson se quedara detenido hasta la realización del juicio

- Claro oficial, el problema es que nuestros padres regresan hasta mañana- les informo Arthur

- Entonces mañana tienen que venir con ellos al medio día - nos dijo el

- Aquí Estaremos - le Dijo Arthur y el se fue dejándonos con un silencio muy incomodo, Que Ninguno se atrevió a romper

Después de eso por fin alguien hablo pero fue mi hermano y solo para preguntarle a James si se iba con nosotros, el al principio se negó, pero no se que lo hizo cambiar de decisión y termino yendo hacia mi casa, el transcurso en el auto fue mas incomodo aun, y el que estaba peor era James tenia la mirada perdida, con rabia y tristeza y bueno yo no encuentro palabras para describir mi estado de animo, había vuelto a sufrir una experiencia muy traumatica aunque creo que esta vez lo estoy asumiendo mejor, no voy a permitir que por culpa de ese imbécil mi vida se derrumbe nuevamente ademas tengo que ser fuerte para ayudar a James, el enterarte que tu padre es un depravado debe ser muy difícil y no puedo dejar caer a James en un abismo, el me a ayudado mucho y yo también lo quiero hacer, juntos vamos a superar este terrible capitulo de nuestras vidas.

Llegamos a mi casa y nos sentamos en los muebles de la sal nuevamente en silencio yo no aguantaba mas silencio quería que alguno hablara, que me dijeran lo que sentían pero ambos estaban muy dispersos así que subí casi que corriendo hacia mi cuarto, me tire a la cama y solté todo ese llanto que había estado reprimiendo, minutos después escuche que tocaron la puerta, me levante y me dispuse abrirla, sin ver quien era volví a mi cama y me senté para observar mejor a la persona que entro.

- Lo siento tanto Ana, no se si puedas perdonarme pero ten muy en claro que yo te amo - Dijo James con su voz triste y su cabeza gacha

- James yo no tengo nada que perdonarte, tu nunca me haz hecho daño y no puedes culparte por los errores de tu padre - le dije mirando sus hermosos y en este momento tristes ojos 

- Pero Ana como puedes pensar así, si yo soy el hijo de ese hombre que abuso de ti y que casi lo vuelve hacer y todo por mi culpa - me dijo el, 

- No James tu no eres culpable, tu que ibas a saber que el era aquel sujeto culpable de mis tristezas ademas tu me salvaste de se abusada de nuevo y lo mas importante porque Te amo - le dije y por primera vez en el día James sonrió y me abrazo muy fuerte, ese abrazo me reconforto bastante, hace rato lo quería James es el único que me hace sentir bien con tan solo una caricia, de mis ojos brotaron varias lagrimas que james limpio

- No llores,  me duele y me molesta verte llorar porque yo se quien es el culpable y me siento el peor ser de la tierra ya que yo soy su hijo - dijo el con rabia

- No pienses en eso te repito tu no eres culpable, nadie puede elegir a sus padres y aunque a ti te toco es desgraciado como padre piensas que nunca lo fue y que de ahora en adelante me tienes a mi y a tu madre que te cuida desde el cielo - le dije 

- Anabelle Gracias por entenderme, pero te juro que ese hombre pagara muy caro por lo que hizo y se pudrirá en la cárcel - me dijo apretando los puños

- Si mi amor estoy segura que así sera, el va a pagar por todo lo que me hizo a mi, a ti y a tu madre - le dije tomando sus manos - Amor necesito hablar con Arthur no quiero que se culpe por lo que ha pasado y menos que te culpe a ti -

- Si ve háblale, no lo vi bien - me aconsejo el

- Bueno, quédate aquí, descansa en un rato vuelvo - le dije y le di un corto beso

***

- Podemos hablar - le pregunte el voltio hacia mi  y asintió

-Ana, antes de que digas algo quiero que me perdones todo esto es mi culpa, yo debí cuidarte y no dejarte sola - me dijo el, ya me estaba cansando de que todos se culparan, si ellos sabían quien era el culpable porque se torturaban tanto

- ¡Hey! ya basta, esto no es culpa tuya ni de James, el responsable es ese imbécil  ustedes lo único que han hecho es cuidarme, ayudarme y eso se los agradezco en el alma, sobre todo a ti, siempre  haz estado allí desde el primer momento de mi tristeza, gracias hermano no sabes cuanto te amo - le dije y lo abrace, el me estrecho muy fuerte provocando nuevamente que varias lagrimas salieran de mis ojos, nos separamos y el también estaba llorando   

- Ana yo te amo demasiado y te prometo que jamas volverás a llorar por culpa de ese desgraciado - me dijo el limpiando sus lagrimas

- De eso estoy segura y mañana que lo encierren de por vida en  una cárcel podre volver a sonreír - le dije 

- Claro Ana, pero lo que me preocupa es como le vamos a  decir esto a nuestros padres, si te sientes capaz - me pregunto el 

- La verdad no, pero tengo que hacerlo así se decepcionen de mi por haberlo ocultado -

- No te preocupes ellos te van a entender, tu sabes que te aman y jamas te juzgarían - 

- Lo se pero me da cierto miedo contarles - le confesé
-Tranquila te prometo que junto a James y karen te ayudaremos a contarles todo a nuestros padres -  cuando la nombro a ella sentí como si una enorme pelota golpeara mi cara, con todo lo que paso se me había olvidado que por su culpa todo el instituto sabia mi secreto, que bueno ya dejo de ser un secreto, arrugue el seño y Arthur lo noto
- Verdad que tu aun no sabes, pero debe ser ella quien te lo diga, necesitan hablar  y arreglar este mal entendido  - me dijo el
- No quiero hablar con ello me duele mucho que sea una traidora- 
- No Ana, no todo es lo que parece te lo aseguro, pero para saber la verdad tienes que hablar con ella - me dijo y me dejo muy confundida sin embargo no quería escucharla
- Pero que es lo que necesito escuchar, si ese día me quedo muy claro que ella le contó a Melissa todo sin importarle mi dolor - le dije y en ese mismo instante la puerta se abrió y pude ver a Karen con un aspecto muy deprimente, Arthur me lanzo una mirada de las que hablan por si solas
-No quiero, enserio - le dije lo suficientemente alto para que ella escuchara, me gira hacia las escaleras dispuesta a subirlas pero ella me tomo del brazo impidiéndome  subirlas, me safe de su agarre bruscamente sin mirarla
-  Por favor Ana escúchame - me dijo ella con su voz triste, me dio tristeza escucharla así  y no me quedo otro remedio que escucharla igual nada perdía


Me senté en el gran sillón de la sala y ella se sentó en frente mio, sus ojos imploraban perdón y yo no entendía porque razón lo hizo

- Y bien te escucho - le dije rompiendo el silencio y ella miro sus manos nerviosa y después volvió sus ojos a los míos

- Perdóname Anabelle te juro que yo so sabia nada, perdona mi torpe actitud soy la peor hermana del mundo - me dijo mientras lloraba desconsoladamente, me daba pena verla así  al fin al cabo ella es mi hermana menor, y la quiero demasiado, así me halla traicionado me duele verla mal, me levante del sillón y la estreche entre mis brazos provocando que yo también llorara
- Perdóname  perdóname - me decía mientras me abrazaba, pero como hago yo para entender esta situación, como quiere que la perdone con todo el daño que me ha causado, me quede en silencio mientras trataba de que ella se calmara, ella se soltó de mi abrazo y me miro con sus ojos llenos de lagrimas
- No entiendo karen, porque me pides perdón si horas atrás no te importo contarle todo a tu gran amiga - le reproche
- No eso es mentira yo no le conté, ella solo me dijo que había descubierto tu secreto,pero yo no lo dije te lo juro si yo fuera estado enterado de eso jamas se  lo habría dicho - me confeso ella un poco mas calmada, pero ahora estaba mas confundida entonces como se entero ella
- Pero ella dijo que tu le contaste - le dije confundida
- Si pero ella mintió créeme yo al igual que los demás me entere anoche y me dio mucha rabia que ella hiciera eso y le reclame pero la muy estúpida se burlo en mi cara y hasta se atrevió a insultarme pero yo la puse en su lugar y la eche como un perro de esta casa porque tu eres mi hermana y aunque no lo creas te quiero y no voy a permitir que nadie te trate mal - me dijo con rabia y tristeza en sus palabras, me quede en silencio observándola tratando de entender todo lo que me acababa de decir
- Anabelle te entiendo perfectamente yo he sido la peor hermana del mundo, te he tratado muy mal y hasta e sentido envidia de ti, pero créeme te amo con toda mi alma, pero si no me quieres perdonar te entiendo - me dijo ella, todas esas palabras me llegaron al alma hace tiempo no la escuchaba hablar de esa manera tan sincera.
. Claro que te perdono, porque te adoro eres mi hermana menor y siempre he querido que nos llevemos bien, no me importa el pasado lo que importa es que estas arrepentida y te perdono - le dije mientras la abrazaba 
- Gracias Ana te prometo que no volveré a tratarte mal ni a sentir envidia - me dijo ella sonriendo
- Claro, pero como que envidia si mi vida ha sido un desastre - le pregunte confundida
- Tal vez pero siempre has tenido la atención de nuestros padres y sobre todo la de Arthur para el tu etas su única hermana - me dijo ella con la voz apagada y si, era cierto Arthur tenia cierto favoritismo hacia mi, pero todo era debido a lo que me sucedió - Pero tranquila ahora entiendo porque el te protegía y créeme yo hubiera hecho lo mismo si me hubiera enterado de lo que te paso
- Si lo se pero ahora tu  entiéndeme eso que me paso fue muy horrible y no me atrevía a contarle a nadie, no quería que me tuvieran lastima ni que me lastimaran y Arthur se entero solo - le dije
- No te preocupes te entiendo debió ser muy traumatico todo lo que te paso, pero de ahora en adelante yo te ayudare te lo prometo - me dijo ella sonriendo, pero después cambio su sonrisa por una cara de preocupación
- Que pasa - le pregunte
- ¿Que te paso? porque tienes esos golpes, no me atrevía a preguntarte pero enserio confía en mi - me dijo ella, le iba a responder pero en ese momento bajo Arthur  con una sonrisa en su cara
- Que bien me alegra verlas juntas de nuevo - nos dijo el y nos abrazo
- Si karen ya me con todo y no hay razón para estar enojadas - le dije a mi hermano que sonreía
- Si ahora todo esta perfecto solo falta esperar que todo salga bien mañana y que por fin se haga justicia - dijo el, yo asentí y Karen nos miro confundida
- No desesperes mañana te contare todo cuando se los diga a nuestros padres, ahora necesito ver a James, me preocupa mucho, enterarse de todo esto no es fácil para el y yo quiero ayudarlo como el me ha ayudado a mi - le dije a Karen que quedo mas confundida de lo que ya estaba
- Ok, pero porque me haces esperar tanto yo quiero saber ya - dijo Karen como niña pequeña
- Hermana ten paciencia, enserio tengo que ver a James - le volví a repetir y ella pareció entender
- bueno esperare pero el esta aquí - pregunto ella
- Si Aquí esta y no quiero dejarlo solo hay una parte del pasado de el que ustedes no conocen, por eso iba a decirles si el se pueda quedar hoy aquí - dije mirando a Arthur
- Claro que si, como no lo voy ayudar con todo lo que el ha hecho por ti - me respondió el después de eso subí corriendo las escaleras hasta mi habitación...

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Nuevo capitulo para todos los que 

se pasan por aquí, aun queda bastante de esta

 historia por leer, muchas cosas que les sorprenderán

Besos para todos, gracias por leer y comentar me hacen muy feliz